YO Y LA NAVIDAD I

Se trata de una de las celebraciones más antiguas, incluso la que más, si sólo nos refiriésemos a celebraciones a partir del año 0. Dicho año es debido a esta celebración, la cual ha conseguido que entendamos la historia en años a.C. (antes de Cristo) y d.C. (después de Cristo).

"¿Crisis en Navidad?"

En cuanto a las emociones que produce, me agrada ver la fuerza que tiene la Navidad que consigue que nos olvidemos de los problemas que no acaparan. El problema de este problema, valga la redundancia, es que al olvidarnos de los problemas nos olvidamos de que a lo mejor la situación económica vigente no es la mejor para derrochar en regalos durante la Navidad. Aun así, seguimos cometiendo el mismo error Navidad tras Navidad, con la llamada "cuesta de enero", la cual no existiría si fuéramos más prudentes a la hora de malgastar dinero.

"¿Ateos navideños?"

Realmente, la religión está impregnada en todas las sociedades, nos guste o no. Es por ello, que consigue que ateos o agnósticos reconocidos celebren la Navidad y, más adelante, la Semana Santa. Creo que esto es debido a que vivimos en una sociedad que no es consecuente con sus actos, es decir, si es ateo reconocido lo es para todos los ambitos del ateísmo y no ha de compartir ninguna celebración que esté relacionada con la religión, como es la Navidad. Está, obviamente, en todo su derecho, ya que tal vez no desee que llegue la Navidad en sí, sino reunirse con familia y amigos a los que hace tiempo que no ve, pero por qué no reunirse con familia y amigos en otro mes o época del año. Y a aquellos que presumen de ser cristianos y de celebrar la Navidad en su sentido más religioso, sólo decirle que no entiendo por qué si la celebran de la manera más cristiana posible, permiten que haya gente muriéndose de hambres mientras ellos en su Navidad más cristiana gastan su dinero en regalos materialistas e innecesarios. Ya que, si mal no he entendido el mensaje religioso de la Navidad, es ayudar al que no tiene.